La culminación del ciclo lectivo y el comienzo de las vacaciones es algo que se aproxima. Sabemos que el verano 2021 va a ser diferente y las vacaciones no van a ser las habituales, ya que la pandemia sigue en nuestro país y debemos extremar los cuidados.
Desde hace varios años, las colonias de vacaciones han sido las favoritas de los padres para enviar a sus hijos a realizar actividades recreativas. Sin embargo, por la situación que atravesamos, este año he recibido muchas consultas sobre qué hacer en estas vacaciones.
Enfocándome en los niños con TDAH en particular, desde mi punto de vista es importante que los niños asistan a las colonias, también este verano. Lejos de ser una obligación, es una actividad formalizada que ubica al niño en una situación positiva no solo por la actividad física que allí realiza sino también por el aprendizaje y enriquecimiento social que se genera.
En primer lugar, las colonias de vacaciones marcan una rutina. Los niños con TDAH necesitan actividades organizadas y pautadas, saber qué va a pasar cuando mañana me levante. Tener una vida organizada los ayuda, lo que no significa que sea una vida rutinaria y aburrida. Las actividades cotidianas en la mañana también ayudan a determinar un hábito correcto de sueño.
Por otra parte, la actividad física y la actividad recreativa y social mantiene al margen el consumo excesivo de pantallas, algo que se da en mayor medida cuando los niños tienen más tiempo de ocio y los padres no tienen manera de suplir ese tiempo con otra actividad alternativa.
También las actividades lúdicas-sociales que se dan en las colonias de vacaciones ayudan al aprendizaje formal e informal, sobre todo de las habilidades sociales, que se aprenden viviéndolo cotidianamente y creando nuevos vínculos desde otro lado.
Por estas razones, pienso que enviar a los niños a estas colonias es más que favorable.
Con respecto a los tratamientos que se realizan a los niños con TDAH durante el año, incluido los farmacológicos, he recibido muchas consultas acerca de si es necesario continuarlos durante el verano. En este aspecto, no hay una única ni verdadera respuesta , ya que habrá que tener en cuenta la pertinencia para cada situación, consultando siempre con el médico tratante.
Sin embargo, en muchos casos el niño sí requiere tratamiento farmacológico durante todo el año, ya que el TDAH es una condición de 24 horas que no solamente aparece durante el aula. La desorganización, la impulsividad e hiperactividad es algo que puede generar problemas en muchos ámbitos, incluidos los ámbitos sociales y las actividades recreativas.
“¿Debo comunicar a los coordinadores, líderes y profesores la condición de mi hijo?” es otra de las preguntas que se repiten. En mi opinión, es bueno que cada coordinador esté al tanto de que las reacciones que pueda tener mi hijo no es por capricho o por falta de límites de los padres, sino que responde a su condición de TDAH.
Espero haber evacuado las dudas y quedo a disposición frente a cualquier comentario o sugerencia para hablar en los próximos videos.